The Universal, una profecía britpop de la Red actual

Hace 14 años Blur, una banda de británica de rock and pop ya disuelta, incorporó en su cuarto álbum, The Great Escape, un temazo. The Universal es una canción casi profética que habla de una universabilidad gratuita y con poco o nada de sentido, en un mundo donde cada hogar tiene su satélite, por lo que “nadie está sólo“.

El video clip que comparto con ustedes es metafóricamente anti estético, ya que está ambientado en el bar lácteo de La Naranja Mecánica (Burgess, 1962 – Kubrick,1971). Así, con el blanco sin claridad y con muchas palabras sin efectiva comunicación aparecen las pautas para la vida cotidiana global. Una elegante y bella forma de hablar del sentido del sin sentido.Hace 14 años Blur, una banda de británica de rock and pop ya disuelta, incorporó en su cuarto álbum, The Great Escape, un temazo. The Universal es una canción casi profética que habla de una universabilidad gratuita y con poco o nada de sentido, en un mundo donde cada hogar tiene su satélite, por lo que “nadie está sólo“.

El video clip que comparto con ustedes es metafóricamente anti estético, ya que está ambientado en el bar lácteo de La Naranja Mecánica (Burgess, 1962 – Kubrick,1971). Así, con el blanco sin claridad y con muchas palabras sin efectiva comunicación aparecen las pautas para la vida cotidiana global. Una elegante y bella forma de hablar del sentido del sin sentido.

Hace 14 años, cuando conectarse a la Internet era cosa de algunos pacientes propietarios de una línea telefónica fija y el celular era un lujoso e innecesario ladrillo,  una banda de britpop ya disuelta incorporó en su cuarto álbum un temazo.

The Universal (1995) de Blur es una canción cuasi profética que habla de una universalidad gratuita y con poco o nada de sentido, en un mundo donde cada hogar tiene su «satélite», por lo que «nadie está sólo» en apariencia.

El videoclip que comparto con ustedes es metafóricamente anti estético, ya que está ambientado en el bar lácteo de  La Naranja Mecánica (novela escrita por Burgess en 1962 y adaptada al cine por  Kubrick en 1971), el cual, en esta ocasión, es un espacio virtual y, por cierto, real.

Así, con insinuantes flash icónicos, el predominio del blanco sin claridad y muchas palabras de sus habitantes, pero sin efectiva comunicación aparecen las pautas para la vida cotidiana global. Una elegante y bella forma de narrar el sentido del sin sentido, propio del Ser Humano. ¿Habrán leído a Eco?